Presentamos el Kraftoni

El homenaje de Alexander al emblemático cóctel clásico aúna el genio de Gaspare Campari con las fragancias de la Costa Azul.

Rey Logan

Alexander Kraft siempre ha sido un devoto acólito de la Orden de los Negronis, un grupo mundial de devotos dionisíacos que se deleitan con esta bebida tan sencilla y significativa a la vez. Tras haber hecho genuflexión ante el Negroni durante muchos años, parecía natural que Alexander creara su propio tributo a una bebida que se ha convertido en sinónimo de clase, buen gusto y buena vida. Así pues, nos complace enormemente presentar el "Kraftoni", elaborado en colaboración con la excelente ginebra 44°N, destilada en Grasse. Combinando la ginebra, el Campari y el Carpano Classico según las preferencias de Alexander, el Kraftoni es un homenaje excepcional a este cóctel clásico tan apreciado, y está disponible en pequeñas botellas diseñadas específicamente para picnics, viajes por carretera e improvisados "arrodillamientos".

"Mi adoración por el negroni no ha disminuido desde que esta bebida pasó por mis labios por primera vez hace muchos años. Es mi buen amigo y bon vivant Matt Hranek, fundador de la revista Wm Brown, el principal responsable de que el negroni haya vuelto a la conciencia mundial gracias a su increíble libro, The Negroni: A Love Affair with a Classic Cocktail, y que me inspiró para crear mi propia versión en homenaje a esta sencilla pero magnífica bebida".

Lo que hace que el Kraftoni sea verdaderamente único es el uso de la ginebra 44°N. Destilada en Grasse, el epicentro de la producción de fragancias en el sur de Francia, la combinación de botánicos utilizada para crear la ginebra es extraordinaria. La ginebra 44°N aporta notas de salida picantes de cáscara de limón, pomelo y mimosa, con un intenso cuerpo floral de rosa centifolia y jazmín de Grasse. Los toques de mermelada de naranja amarga se contrarrestan con las notas herbáceas de la angélica y el hinojo marino, redondeadas con toques de pimienta caliente, antes de que las notas cálidas del enebro, el iris y la miel bailen con la dulzura amarga del Campari y el Carpano Classico.

Breve historia del Negroni

Hablar de la historia del negroni es hablar primero del Milano-Torino, alias el "Mi-To", que data de alrededor de 1860 y es una combinación de Campari y Punt e Mes. Me quito el sombrero ante Gaspare Campari, que inventó el Mi-To y sin el cual no tendríamos el negroni. El Mi-To se llamó así porque el Punt e Mes solía proceder de Turín y el Campari de Milán. Curiosamente, un Mi-To hecho hoy en día probablemente tenga un sabor más parecido al de los negronis de antaño, cuando el Campari se hacía con cochinilla triturada. Del Mi-To surgió el Americano, el primer cóctel mencionado en las novelas de Bond de Ian Fleming. De nuevo, creado en el bar de Gaspare Campari en Milán, se le añade un chorrito de agua de soda, y toma su nombre de la popularidad que encontró entre los turistas estadounidenses.

Y así llegamos al negroni, cuyo origen se cree que fue en Florencia, en 1919, en el Caffè Casoni (entonces llamado Caffè Giacosa), en la Via de' Tornabuoni. La historia cuenta que Pascal Olivier, conde de Negroni, lo inventó pidiendo al camarero, Fosco Scarselli, que enriqueciera un Americano añadiéndole ginebra en lugar de agua con gas. Scarselli se tomó la libertad creativa de añadir una rodaja de naranja en lugar del habitual adorno de limón del Americano para diferenciar las dos bebidas. Decir que al Conde le gustó es quedarse corto. Ese mismo año, no tardó en fundar la Destilería Negroni en Treviso, que producía una versión ya preparada llamada Antico Negroni (¡el antecesor del Kraftoni!).

Desde entonces, el negroni se ha convertido en la personificación de una bebida con clase que se disfruta mejor bajo la cálida mirada del sol mediterráneo. Orson Welles, que sabía lo que se hacía en un bar, escribió sobre esta bebida en una carta al Coshocton Tribune mientras trabajaba en Roma en 1947: "El amargo es excelente para el hígado, la ginebra es mala para la salud. Se equilibran mutuamente". Más recientemente, el negroni ha experimentado un gran renacimiento en Pitti Uomo, la feria de moda masculina de Florencia, donde la manada de la moda y el estilo se reúne en el Caffè Gilli y se bebe su peso colectivo.

Creemos que el Kraftoni es un homenaje más que merecido a la más emblemática de las bebidas y una magnífica bebida para llevar de viaje, con la seguridad de que en cualquier parte del mundo, basta con encontrar un vaso, un poco de hielo y una rodaja de naranja para relajarse y disfrutar del cálido resplandor de la historia de la coctelería.

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